En el sector de odontología, la adhesión es un tema muy importante para los tratamientos de restauración dental. El ácido fosfórico es un producto muy utilizado en las restauraciones y cementaciones para conseguir procedimientos exitosos, duraderos y con una calidad estética superior.
Hoy en el blog de Pochteca te contaremos sobre el uso del ácido fosfórico en odontología, sigue leyendo para conocerlo.
¿Para qué sirve el ácido fosfórico en odontología?
El ácido fosfórico se utiliza en el proceso de grabado dental. Este procedimiento dental ayuda con la colocación de las restauraciones, y el ácido tiene un rol muy importante en la adhesión del material y en la reducción del riesgo de que los pacientes desarrollen hipersensibilidad después de las restauraciones.
El ácido fosfórico actúa de diferentes formas: crea porosidades en la superficie del esmalte dental a través de un proceso de desmineralización, el cual permite que el adhesivo penetre y se fije.
En la dentina, este ácido ayuda a retirar el barrillo dentinario, o smear layer, alarga los túbulos dentinarios y expone la red de fibras colágenas.
Ahora bien, los sistemas adhesivos universales permiten que el proceso de grabado ácido se realice de forma selectiva, es decir, solo en el esmalte para mejorar la adhesividad y reducir la sensibilidad dental, o solo en la dentina donde no es necesario retirar grandes estructuras dentales.
Gracias a esto, las variaciones del grabado ácido se pueden usar en estructuras dentales naturales, en coronas, rellenos o carillas.
Aunque se utilizan otros ácidos, como el fluorhídrico o el poliacrílico, así como grabadores sin lavado, el ácido fosfórico es el material más popular para la técnica del grabado ácido gracias a su cualidad para usarse tanto en el esmalte como en la dentina, proporcionando una superficie óptima para la adhesión del material.
A nivel microscópico, se aprecia cómo el grabado ácido erosiona de forma controlada las superficies dentarias para generar microporosidades por las que ingresan los adhesivos y materiales de relleno y aumenta la superficie de unión, con lo que la restauración se mantiene fija y estable sobre la pieza.
Técnicas de grabado ácido
Existen diferentes técnicas para el grabado ácido, que varían dependiendo de la extensión de la lesión y el tipo de restauración a realizar:
Grabado ácido total
Para esta técnica se usa un gel de ácido fosfórico en una concentración de 30% o 40% con el que se prepara al esmalte y la dentina para los procedimientos de adhesión, sin interferir con la polimerización de las resinas.
Con frecuencia se usa esta técnica en cavidades que necesitan mucho relleno y en las que podría haber problemas de adhesión.
Grabado selectivo
Es un tipo de grabado dental en el que se aplica el ácido fosfórico solo en la superficie del esmalte, sin llegar a la dentina. Se usa para prevenir la sensibilidad en las zonas profundas del diente.
Autograbado
En esta técnica se aplica un adhesivo con grabador químico que reemplaza al ácido fosfórico, ya que se usa en restauraciones que no corren el riesgo de salirse.
Características del ácido fosfórico en odontología
El ácido fosfórico, también conocido como ortofosfórico, es un ácido grabador de uso universal. Es un líquido incoloro, transparente, un ácido inorgánico con alto contenido en fósforo, el cual es un mineral que se encuentra en los huesos y dientes e influye en diversos procesos metabólicos.
Para aplicaciones dentales, el ácido fosfórico se utiliza en líquido o gel en concentraciones de entre 30% y 40%. Se encuentra en jeringas precargadas de diferentes tamaños, o en botes de 5 ml o 15 ml y con puntas de aplicación para facilitar su uso.
Para distinguir el producto en el diente y saber qué superficies alcanzó, al ácido se le da un tratamiento de color, que puede ser verde, amarillo, púrpura o azul. Estos productos se dejan sobre la superficie del diente durante 15 a 30 segundos para que erosionen al diente y permitan al odontólogo seguir con el proceso.
¿Hay riesgos con el uso de ácido fosfórico en odontología?
El ácido fosfórico puede causar ampollas, quemaduras o irritación. Sin embargo, con el aislamiento adecuado, respetando los tiempos de grabado y el trabajo de un odontólogo profesional que utiliza las técnicas de grabado dental correctamente no habrá daño al paciente.
Por su parte, las técnicas de grabado pueden causar sensibilidad dental con el frío o calor durante algunos días, dependiendo de la profundidad de la cavidad.
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