De las 10 tendencias de consumo global para 2017 publicadas por Euromonitor aparece el “Bienestar como símbolo de estatus”.
Es una tendencia que no es nueva, pero se ha venido consolidando, el aumento en la intención de la adopción de hábitos saludables, así como el hecho de asociar este estilo de vida con el éxito personal, es un cambio que contrasta con lo que anteriormente se relacionaban con éxito, como la posesión bienes materiales u objetos de lujo, actualmente las personas tienden a mostrarse más interesadas en conservar la salud, buscan tener una dieta que incluya alimentos saludables pero sin sacrificar el sabor, ya que lo consideran como parte del bienestar, “consumir comida saludable y que además me guste”.
La industria de los alimentos ha respondido con productos más naturales, con menos calorías por porción, porciones más pequeñas, productos con reducción de sal, menos grasa y con más fibra.
La aspiración entre generaciones más jóvenes es a valorar más las experiencias y a obtener una vida con un buen balance, le dan mucha importancia a tener calidad de vida.
La adopción de hábitos saludables de alimentación, así como la práctica del ejercicio para mantenerse jóvenes y saludables, es el modelo al que aspiran y lo asocian con éxito personal.
Los sectores más favorecidos por esta tendencia son el mercado de belleza, productos y tratamientos, gimnasios, equipos de ejercicio, spas, meditación, yoga, nutriólogos, suplementos alimenticios y viajes.
Se perfilan buenas oportunidades para los giros y los productos que puedan satisfacer la necesidad de facilitar un estado de bienestar.
El consumo debe convertirse en una experiencia, más que objetos que poseer, las nuevas generaciones compran momentos.