La revista impresa

En México en 2016 se editaron 101 millones de revistas con un valor de producción de 1,072 millones de pesos, con un volumen de venta de 96 millones de piezas y un valor de facturación de más de 994 millones de pesos, según la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana con datos de la INEGI.

La primera revista se editó en Alemania entre 1663 y 1668: Discusiones mensuales edificantes (Erbauliche Monaths-Unterredungen).

Era publicación periódica editada de forma mensual, con un tema especializado reunido en unas cuántas páginas.

Es un medio diferente a un libro y a un diario o periódico, así nació un concepto muy exitoso, y una nueva forma de entretenimiento.

Las revistas impresas son un medio que todavía tiene mucho potencial pero debe de evolucionar, en un entorno difícil con mucha competencia siempre hay lugar para buenos proyectos.

Lo impreso tiene el valor de que permanece en el tiempo, las notas digitales son reemplazadas en minutos, no está garantizada su permanencia, los sitios web y portales que hoy son exitosos no es posible saber cuánto durarán puestos en línea, una nota o artículo puesto en ese sitio web puede durar mucho menos tiempo del que pensamos, si queremos conservar información valiosa la impresión es una apuesta más segura.

Hojear una revista contenido valioso, bien impresa, con un buen diseño es una experiencia muy distinta a ver el mismo contenido en un sitio web en los que la visualización cambia en cada dispositivo.

Las revistas de lujo son un nicho que valora la experiencia de un buen papel y del arte de la impresión, son ejemplares coleccionables.

Los anunciantes aún pueden capitalizar los medios impresos ya que con la saturación de información es difícil llegar al consumidor, la revista impresa puede usarse como enlace a los portales digitales que contienen información de marcas y/o productos es una opción que no se ha explotado es la interacción del impreso y los códigos QR y menos aún la con la tecnología NFC (Near Field Communication).